Nos dicen, que al final de nuestro camino, encontraremos a la persona que tanto necesitamos para formar una familia. Nos hacen creer que el amor es algo bonito, y duradero algo tan sencillo y fácil como hacer feliz a una persona. Pero no es así sufrimos siempre, sea cual sea la causa, creo que si no sufres no aprendes, pero porque no cambiamos las historia, porque no nos dejamos llevar cuando alguien nos ama, porque no le hacemos las cosas más fáciles, porque no le prestamos nuestro corazón sin miedo a que lo rompa, porque no dejamos que miren más allá de el?
Creo que una de las cosas que menos me gusta del otoño invierno es que te conviertes en una cebolla andante. Capas y capas que, en cuanto entras en un sitio cerrado, te tienes que poner y quitar con una destreza brutal en tiempo récord. Cuando uno está en el sofá de casa, con los patucos, el pijama de felpa y la mantita por encima, la mente ronronea como si fueras un gatito... Lo más importante del invierno no es la cantidad de capas que te tienes que poner encima, si no la cantidad de abrazos que recibirás. En invierno es cuando más abrazos solemos dar, para arropar a la otra persona que tiene frió, parecerá una tontería que hable de los abrazos y esas cosas pero es la mejor estación del año para saber quien nos quiere de verdad y si estaría dispuesto a darnos ese merecido abrazo que tanto necesitamos.
Es viernes por la mañana son las 11:00 en punto entra el sol por la ventana aún con los ojos medio cerrados. Empiezas a sentir olores que intentas descifrar... pan tostado, café, zumo de naranja recién exprimido. Escuchas una cucharilla picando tímidamente contra la taza, por el sonido que hace sabes que es pequeña y pesa poco.... Los colores de la habitación cada segundo son más claros, más nítidos, el sol acaricia suavemente los muebles y la colcha como si te dijera al oído... "Buenos días".... El tacto de la cabeza en la almohada es suave, las sábanas te abrazan y la armonía de todo hace que sea perfecto. Es viernes y no tienes nada más importante que hacer que vivir disfrutando de cada minuto, de cada momento de paz para ti.
Para mi hay algo muy importante en mi vida que es estar en paz, tener un momento de tranquilidad, calma, y armonía. Supongo que cuando eliges un lugar para pasar tus días libres, aunque solo sean unas horas, tienes que saber muy bien lo que quieres; lo que puedes o estás dispuesto a pasar por alto y lo que no. ¿ Mis premisas en este caso? Calma, tranquilidad. Sencillez, aire limpio. Conectar conmigo misma más que nunca. A veces es bueno desconectar para saber lo que quieres y lo que no quieres, sin mobil, sin amigos tu sola, tener un momento para ti sola/o. Un momento en el que puedas conectar contigo misma, sin necesidad de pedir ayuda. Hay un lugar que para mi es mágico, y es este, asomarte a los balcones y ver toda la ciudad, ver como la gente es tan pequeña, tan frágil que tienes el mundo a tus pies.
Hay un sonido para mi que es el mejor de todos, del buen tiempo que son los pájaros... Vale los pájaros pian siempre. Esta mañana he abierto las ventanas y lo único que se oía a esas horas (8:30am) era a ellos. Las farolas ya estaban encendidas y el sol ya había despuntando. Hoy he dormido bien, la verdad que siempre suelo dormir bien, algunas veces me cuesta más porque soy de quedarme hasta tan tarde despierta, y nunca quiero dormirme. Cuando me he levantado y he salido a la calle, se respiraba ese aire de verano invierno, ese verano que es distinto al del año pasado, y sabes que este verano habrán cosas nuevas que el año pasado no hubo. Cuando notas en verano por las noches ese aire fresco que refresca solo se te pasa una cosa por la cabeza y es que te estas dando cuenta que se está acabando. Te das cuenta de que acaba el verano porque apagan las luces de las atracciones, como cada vez hay menos gente en la feria, como la gente ya está dejando de quedar contigo, como las sillas se van apelotonando en una fila, como el aire te cala hasta los huesos.
A veces el mundo nos hace ver la realidad, que estamos solos. Hoy he tomado la decisión de que si estoy sola es por algo. Será porque he sufrido en la vida, y no quiere la vida que vuelva a sufrir. Tampoco necesito a una persona que este a mi lado dándome amor me lo puedo dar yo misma sin la presencia de alguien. Hoy he vuelto a escribir un capitulo más en mi vida, mientras me remango las mangas de el jersey pienso , en como el curso de las cosas cambia irremediablemente una vida de una persona. De repente llegas a un sitio, empiezas a tirar de un hilo y conoces a gente maravillosa, y ya quieres que se queden en tu vida para siempre.
Dicen que tu casa es tu refugio, que se convierte en tu cueva de los secretos. Donde puedes bajar las persianas y
el tiempo se para.Desde
que era muy pequeña me ha gustado ver casa, lugares, ir a sitios y respirar
aire diferente, viajar, conocer otras culturas. Cuando estás fuera de
casa aunque sean unos días o apenas unas horas, te das cuenta de lo importante
que es que ese espacio nuevo esté en paz; que mueva una energía en el mismo
sentido en el que estás tú en ese momento. Activo, en modo relax, con ganas de “acción”.
A veces necesitamos cometer errores para darnos cuenta de que las historias acaban que no hay vuelta atrás y que mejor cerrarlo tal y como esta. Si solo tu empujas y te interesas no sirve de nada todo el tiempo que inviertes en ello. Es inútil estar chocando contra un muro irrompible sin ninguna grieta.Que si, que duele cerrar historias que crees que no han acabado pero ¿De que serviría esperar a que acabe? Cuanto mas tarde mas duele dicen. Así que mejor cerrar la puerta echar las diez llaves que tienes y tirarlas todas al mar.
Hace sol es verano, disfruta los días y olvida las penas. Hoy es un buen día para sonreír, y demostrarle al mundo que no estás sola, que no necesitas a alguien para ser feliz, que hay cosas que te hacen ser feliz sin tener nadie al lado, porque en los detalles más pequeños se encuentra la felicidad más grande. Tras la niebla voy a empezar, tras todo esos problemas, esas preocupaciones que me nublaban voy a empezar de nuevo. Y aunque mi corazón está roto, los pedazos son fuertes y volverán a construirse solos, con el paso del tiempo. Ya no me contestes, prefiero que te alejes sabiendo que me mientes, y que tampoco vas a poner de tu parte para quedarte. La nube que tenía encima de mi cabeza a desaparecido, es hora de afrontar los cambios, y tirar para adelante. Es hora de afrontar los nuevos cambios, esos que son buenos para ti, y te harán evolucionar.